Los juguetes a control remoto, es decir, controlados por radio (Radio Control) son populares no solo entre los niños, sino también entre los adultos. Jugar estos aparatos juntos puede ser divertido para toda la familia. Los autos RC siguen siendo los más populares, pero también hay vehículos flotantes y modelos voladores. Si va a comprar un juguete de este tipo, debe considerar varios puntos. ¿Cómo elegir el mejor juguete?
Escala y gestión del transporte
El primer parámetro al que hay que prestar atención es la escala, que indica el tamaño del modelo en relación con el original. La escala muestra cuántas veces el modelo es más pequeño que una máquina de tamaño completo u otro vehículo. Los juguetes de control remoto diseñados para niños son de tamaño pequeño, por lo que evitan que se monten en terrenos irregulares. Puedes jugar con ellos en casa o en una superficie plana, pero no, por ejemplo, en el césped. La escala de los juguetes que se pueden encontrar en las tiendas suele ser de 1:43, aunque también puedes encontrar modelos con una escala de 1:30, 1:16 o 1:12. Los modelos de control remoto profesionales diseñados para entusiastas experimentados incluso tienen una escala de 1:10. Si recién está comenzando a familiarizarse con los vehículos controlados a distancia, vale la pena elegir productos que sean un poco más pequeños.
El siguiente parámetro es la distancia que el vehículo puede recorrer desde el control remoto. En los coches de los niños, el alcance del mando a distancia suele ser de 10 m. ¿Cómo es realmente el control? El control remoto funciona con una frecuencia de radio específica. Puede tomar la forma de un controlador de juego, una pistola o un volante.
Potencia y velocidad
Los vehículos a control remoto se pueden alimentar de dos maneras: baterías o baterías recargables. Tanto el vehículo como el controlador deben estar alimentados. Si el modelo funciona con batería, se debe incluir un cargador. Vale la pena prestar atención a esto al comprar un vehículo.
La velocidad a la que se moverá tu juguete también es importante. Los coches de radiocontrol para niños suelen desarrollar una velocidad de 7-10 km/h. Para los más pequeños, debe elegir modelos más baratos y para niños mayores, con características adicionales. Hay juguetes en el mercado que son casi idénticos al original, como el Ford Mustang, el Ferrari Enzo o los coches de Fórmula 1 de 1969. Tienen una sólida construcción de metal fundido a presión. ¡Las máquinas son resistentes a los daños, tienen fuertes suspensiones y su alcance alcanza varios cientos de metros! Si puede permitirse comprar un juguete más caro, definitivamente vale la pena invertir en un modelo que le dure más tiempo y le brinde más placer.